viernes, septiembre 3

La mujer que amaba a Leonard Cohen

Recurrentemente el frío, después ladridos, después silencio.

Media hora, tiempo que sucumbe a designios absurdos; los aviones, el ruido, el horror en la mirada de quien espera la muerte.

Conoce aquél cuarto, ha andado esos suelos y todo lo que supo alguna vez del amor lo aprendió de un extraño. Ahora todo parece haber terminado, su mirada recorre los extraños derroteros que dibujan las esquinas de una habitación cenicienta que exhala frío y tiniebla.

"Es difícil tomar de la mano a alguien que ha alcanzado el cielo solo para rendirse"

Sus pulmones se contraen con el aire viciado de soledad y espera; duelen, sangran, aguardan por ese parloteo extraño de palabras prestadas que inundan los cuadernos antiguos de cuando era niña; las palabras de alguien más que ahora inundan sus pulmones de líquido denso y y ceroso; catorce minutos, el tiempo está signado.

Era una niña, hasta hace unos instantes era una niña, jamás logró descubrir lo que hace que una persona se convierta en adulta; una niña con los ojos desorbitados por los ataques de dolor que acometen cada cierto tiempo, una niña pequeña de rostro avejentado con la piel que emana ese olor a antigüedad... ese frío de escucharlo, asentir con la cabeza su poesía, intentar alcanzar las notas de la guitarra con una garganta desgarrada por los ataques de tos sangrante.

Los momentos finales de la vida parecen estar signados por una especie de frío en los huesos, no hay temblor, no hay esa sensación en la piel... solo un pequeño rumor horroroso dentro del cuerpo; y ella respira con dificultad, respira con amor incondicional. Ahora la caída se produce con una inenarrable ausencia de vértigo, un golpe seco casi inaudible... como su voz, grave, profunda, sentida... la voz de un aleluya ancestral.

Se aleja entonces en un siniestro aullido de fuga, su pecho acoge todas esas canciones que no hablan de amor, el único tesoro que le dejó un hombre extraño se libera en el último segundo de oxígeno que le queda... y no quedan palabras para describir cosas como el amor, las cadenas y esas cosas que no se pueden desatar.

Alguien alguna vez le dijo que esa no es la forma de decir adiós.

domingo, mayo 16

Oruro

Oruro es el andén 2 de la estación de buses, en la que se aglomera la gente, un nauseabundo olor a Diesel quemado, voceadores que aclaman las salidas y vendedoras de Linasa con empanadas.

Pero oruro es un espejismo.

jueves, marzo 18

Marzo

Ella es penuria en la distancia y mañana es solo un día que viene después de ayer,
hoy es el nombre que ella le da al olvido.
según ella soñar es caer.

Ella tiene un alma lastímera y un arma encasquillada, y la lastiman las contracturaciones de su ombligo, y los estertores de vida que le cortan las entrañas cuando ama.

Ella se llama guitarra de Harrison en una canción de los Rolling Stones,
yo la llamo por su nombre que tantas penurias ha causado y que a falta de un aciago destino, es un horóscopo sin premoniciones.

Su nombre es soledad cuando camina por la Perez y mira a los transeuntes correr entre los automóviles, su nombre es sueño a las 10 de la mañana, y por la madrugada me llama a su guarida para mostrarme los astros agonizantes que respiran en ella, su nombre es verano en el incesante blandir de los vientos en Abril.

Otoño es su luto de los acordes de un nocturno de Chopin,
incertidumbre es el nombre que le da a los destinos. y camina por calles que no desembocan en ningún lugar, vias que comparten un solo aire.

El frío es una diadema que cuelga de su cuello, que quema su pecho y le hace compañía,
ella es sonrisa que va de canción en canción, de cajetilla en cajetilla,
es el humo y el vapor, el húmedo calor de los árboles que gritan su noche por los nombres.

A su biblia le llama maleficarum, a los sacrilegios les dice rezar,
a mi desesperada espera le dice paciencia,
a fumar le llama almorzar.

El aire de su ausencia se llama tierra,
el espacio que habita se llamá jamás.

miércoles, septiembre 9

19 de Julio

La gente no siente

La gente respira, camina y observa,
tuerce la mirada hacia los extraños.
La gente espera en el momento exacto,
se detiene y se deteriora,
pierde y sigue caminando
encadenando destinos que no existen.

-no llora, no ríe, no se emociona-



Cuando la fiesta haya terminado,
no seremos más que extraños;
y te miraré y no veré más que sombras;
y sacrificando todo lo que fue
-volveremos a ser los extraños detrás del cristal-


pero al final las cosas se detienen,
se abrazan y se conservan,
porque al final las cosas retornan,
y vuelven a ser lo que no eran.
-y se crea el espacio, cuando aceptamos la derrota-
Y cuando el brillo de los rayos te ilumine
y la luna alcance el cenit en el cielo,
hallarás lo mismo que buscaste tiempo atrás
cuando las cosas eran lo que volverán a ser.
Porque al final tú me mirarás y no verás más que sombras,
y partirás hacia el sol que es tu última morada.

la luna te llamó mi diosa,
pero yo no tuve nada que ver
-lo juro-

domingo, julio 19

cold

Se configura en lo oscuro una reminiscencia que tarda en tomar forma, pero que al final no existe.

Si se pudiera ser real ¿qué te gustaría ser?

Todo el tiempo, todo lo que vi y no me vio.
a veces me percato de
ellos.

y a veces no.



pero tengo las manos congeladas, que miro y me absorben la fuerza
y esta tos de fumador,
y esta incoherencia que te grita


y lo que escribo.

porque no hay más. El tiempo es una constante atribulada

Lo malo de conocerte es que no te conoceré nunca más

Lo bueno es el frío y la nieve que se niega a nevar.


TE llevan a casa esta noche.

y me miran... cuando vos no me ves.

martes, junio 9

El Transcurrir de la Mirada

La oscuridad densa y pesada descendió a sus infiernos, él la tomó entre sus brazos y la oscuridad lo transparentaba.

Todas las miradas lo seguían en la vorágine de miedo y desolación de la que su cuerpo era solo una deformación en la densidad de los días; él se observaba a través de aquellas miradas y los ojos que lo atormentaban lo veían transparente y lo trastocaban, sentía el terror y el hambre, su sangre se convertía en estallido al bombear de su corazón lánguido y estrujado. "Los demás me están mirando... los demás solo quieren mirarnos... vamos a jugar no te harán daño... sabes que te quieren... matar... ellos te están viendo... solo quieren jugar contigo... no te harán daño... solo quieren quererte... te matan solo juegan a quererte y te matan... solo juegan a matarte mientras te quieren... ellos te están mirando... eres joven... ellos te quieren en su juego... no nos harán daño... vamos a jugar".

La oscuridad se deshacía en trazos temerosos y fuertes, y no pudo seguir... corrió y recorrió el furtivo espacio de la letra que lo rebalsaba... y cayó y se dejó caer; luego se miró y volvió a su voz y su mirada.

La mirada que lo atormentaba

"shhh ellos no van a vernos aquí... no van a encontrarnos... vamos a encontrarlos y a jugar con ellos... ellos nos quieren hacer daño... solo quieren jugar"

miércoles, mayo 13

No substance

Esta noche se advierte el advenimiento de la muerte.

Acoge entre su pecho el hálito dorado que subvierte sus ojos al infinito
donde encuentra su razón, su ropaje y sus harapos.
Y observa entonces en dirección suya,
donde los vientos han dejado los resabios de su paso,

Así ha de interpelar a su suerte en el límite máximo de las sincronías del espacio;
allí donde se encuentre en su fría vereda de la realidad última en la que es,
con el cansancio de susurrar al vacío
-lo que queda de palabras que le sobran.

Un tumulto rige su voz trémula en el vibrante soplo
donde los mares de olas reberveran su frío de huesos y centinelas.
y le quitan la respiración a medida que se hunde.
Después duerme, y se sueña en un sueño que no es aquél
-sino un sueño que no lo contempla

Y en la ráfaga ardiente del aire que despunta de luz sus pupilas
Toma por sí mismo un objeto que no le es dado,
arrebata el futuro que todos esperan y se apropia de aquél en doloroso silencio
extiende los brazos y emerge en tanto absoluto y finito.

y vibra en la posibilidad de velar por su efímera eternidad,
en los kilómetros de eternidad que le restan por quemar.

La muerte adviene en la advertencia de la noche.

domingo, abril 12

Monólogo dedicado al gusano

Yo soy el que te trajo, el que te dió la existencia y el que te la absorbe.

Soy el que trae el fuego y lo reduce, aquél que con sus manos ensoberbecidas modela los designios perfectos y exactos de tu angustia de espera, de tu fobia de vida, de tu libertad de las cadenas plateadas que te atan a mi. -En silencio espero, y confirmo tu existencia en un polvo adormilado de dimensiones inconmensurables del universo vasto, este abismo donde pacientemente espero-

Soy el reflejo que se te escapa en el espejo, soy el otro, aquél al que nunca podrás alcanzar a tocar, soy la palabra hecha herida sangrante que destila una misearble autocompasión que mana de tus arterias abiertas. Soy la inquietable simetría del espacio, soy el tiempo que consume tu presencia y las libertades del tiempo que te precede y que te antecede. Soy hueso... soy la muerte que se te atesora en la carne viva.


-And... there was a sense of disappointment-

martes, abril 7

A-Dieu

-Te- Escribo

Y escribo por la rabia,
Porque te extraño.
Porque en las rocas anida un luna vacía
Porque el silencio insomne mide tu ausencia,
tu no-presencia que desborda el abismo de la noche
mordaz, rabiosa y doliente -ausente-

La noche que desgarra las paredes,
que reside en mi pecho y en mi alma.

En el espacio partido por la mitad,
Blanco, brillante y pulcro.
En el espacio abierto y dirimido a punta de escalpelo,
en el espacio que libras, que inspiras.
te esperaba.

Pero escribo-te- con rabia,
Con la rabia refulgente y ansiosa,
con la rabia triste y cantante.
Te escribo el A-dieu definitivo,
del que no promete nunca jamás
ni después del después
ni el ahora más que nunca.

pero te escribo... en la brutalidad del día
de este 7 que se corroe en el abril que alguien me ha robado.

y no más.

-Nada más-

viernes, abril 3

Canciones para llevar

En el bolsillo, con tus amigos, con aquellos que se resisten a creer, a pensar y a caer.

Pensando en tí y en las canciones que se desprenden de la tempestad, que se recogen en pequeños charcos que aparecen en el traslúcido brillo que refulge en el piso a la luz de la vela con la que te acompañas a escuchar las canciones de lluvia.

-Eres- hoy, día, y mañana que la lluvia arrecia y las canciones se estrujan en un estertor inimaginable. El pecado, el día del nacimiento del espacio, de las cosas que habitan el silencio, el día que surgieron todas esas palabras, esos charcos donde se desprenden las luces de las velas que acompañan canciones los días de tempestad y lluvia. El día que estalló, que se insertó el miedo. El día menos pensado fue.

Y fue lo que pensamos y soñamos aquellas noches, fue lo mismo que nos habíamos negado a dar parte, fue el sueño, fue la realidad y lo llevábamos en el interior de cada respiración. La última de las canciones sonó.

-y llegaste al otro lado, y cruzaste la línea-

y la luz de la vela que se refleja en los charcos cuando te acompaña a escuchar las canciones de lluvia y tempestad... se apagó.

lunes, marzo 23

Antes que se cumpla el año

Se ahogó en mis manos.

Comenzó a absorber el frenético líquido
de la fría postración de la sombra;
mis manos ahogaron su existencia.

Anochecieron sus manos,
se apagaron los mandatos del final de una existencia,
y me miraron sus ojos
mientras yo miraba su mirada
-y su mirada existía
en lo más profundo de mi ser que se ahogaba
a medida que se ahogaba su ser en mis manos-

Y la terrible fortaleza que nos circundaba,
y la fortuita soledad que nos ahogaba
Y el advenimiento de todas las cosas que se ahogan en el olvido.

Era demasiado.

Que se cumpla el año.
Yo esperaré sentado

sábado, marzo 14

Extraño (tu voz)

Solo una, y se fue, en la demencia y la puerta, pude ver, (y ahora no). Es infinito el silencio.

Es infinito el silencio, a decir de su voz cansada, el lextalionis del mundo y su ojo por ojo que no sé cómo termina. Una razón plus la vida, un sentimiento extraño, y los zapatos mojados... un, dos, tres, vals en segunda quese limita en su piel y la mantiene insegura.

Hay un Dios y no hay; después el igual es absurdo. Hay un silencio y tampoco, solo infinitos deseos de caer en el mordaz hambre de los insultos. y caer y seguir cayendo, y silenciar y seguir cayendo, a la vera de su piel, donde confluyen los ríos, un silencio se guarda infinito.

El dolor pudo ver, se hizo añicos su piel, se enterró y durmió, decidió no despertar, pero el silencio que ha sido infinito, ha causado su sonrisa, y un momentos más, mas la vida que termina, el silencio se retruca y vuelve un tanto a la vida. Después todo es absurdo.

-Alguien extraña algo que no conoce-

lunes, marzo 2

La Niebla...

No es lo que se atesora, es lo que se olvida.
No es lo que se extraña, es lo que se quema.
No son las pisadas, son las huellas.
No es el fuego, es la ceniza.

No es el canto, es el silencio más absoluto.
No es el brillo, es la ceguera.
No es la realidad, es la desesperanza.
No es la Suerte, es el Infortunio.

No es lo que se recuerda, es lo que se interna.
No es la trivialidad, es la aspereza.
No es lo que se ama, es lo que se pierde.

No es la compasión, es la piedad.
No es lo que se piensa, sino todo lo contrario.

domingo, marzo 1

Al permitirle la entrada a las terribles ilusiones del hambre y la desesperación solo se abre una nueva dimensión del horror.

Pero el horror es esquivo, el horror está oculto y no hay nada que pueda hacerlo saltar a los ojos de la superficie de las cosas. El lado frívolo de los continuos eventos que se suceden en las coordenadas del espacio tiempo son en cierto modo algo terroríficos, pero los hombres están acostumbrados a mirarlos directamente. Pero el horror se les oculta y los tienta desde la tiniebla que se produce por el desconocimiento de su hambre.

Y el hambre se oculta, y el hambre corroe, y el hambre está sin estar precisamente.

jueves, febrero 5

ex Nihilum

Es un preludio al final de las cosas que decidieron estallar.

Ahora, por supuesto, me pongo a escribir vanaglorias a la venganza de la crueldad y la exacerbada pasión con que las cosas fluyen, y de la nada surge la ilusión de cometer antiguos crímenes que me han sido vedados, no importa cuando... no importa porqué... pero escribo apologías al silencio, disculpándome de mis voces estridentes que solo rompen la paz... y siguen siendo monotonía.

Pero Ex nihilo nihil fit, osea que nada surge de la nada, ni mis palabras ni mis voces ni mis callados aullidos, y hago esto respecto del tiempo que vengo caminando y dando vueltas en una habitación, bebiendo la vigesima sexta taza de cafe del día, y de los cigarrillos ni contar.

Las cosas decidieron estallar, como pocas veces sucede en las constantes del espacio tiempo. De mi lado quedaron las cenizas y al otro lado el daño colateral del estallido... que tampoco es mucho si se lo compara con el polvo, De igual manera las luces vuelven a rebotar con los espejos... y encandilan los ojos.

pero no existen, ni las cosas, ni las luces.

martes, febrero 3

París

París está muy lejos, demasiado lejos para que se derrumbe a mi alrededor.

No es el viaje ni mucho menos la distancia, ni el tiempo que podría tomarme. Es la lejanía lo que me hace sentir el ruido frío de la verdad que atraviesa extraños derroteros entre las palabras.

París no es el lugar, sino la vieja esencia de la derrota, la mano cortada que busca en el espacio un objeto que no es, que nunca fue, ni será jamás. París es el carcelero que anida en tu vienre, que remienda cada costra, que apologiza las causas injustas y los casos perdidos.

París es el conflicto.
París es el problema.

París Arde y no está... pero sigue el conflicto.

domingo, enero 4

Sombra

La sombra ha dormido y en sus ojos clarea un día.

Resurgirá de la sombra un frío clamando por respirar las exhalaciones de la sombra, ansioso por volver a la pureza, clamando hasta el día en que muera, cuando se alce la tiniebla en el sueño de la sombra.

Suavemente se alzará la claridad de una luz en el mirar de la sombra, en su garganta se ahogará la palabra pendiente, y nada habrá de cambiar, ni llegará el anunciado final... Solo se sentirá la niebla en la transparencia del amable beso de la sombra. Y la sombra surgirá en el polvo y será un frugal escalofrío de su voz en la piel de los muertos, en el sentir de su fuero interno y en las cenizas de la mañana que vendrá.

Y cuando haya dormido la sombra, en medio de las luces que encandilan sus ojos, atravesará la membrana del sueño, envolviendo su cuerpo de sutil encanto. Y trepará su voz hasta la sangre, se robará un hálito de esperanza y oscurecerá en el cielo.

Y esperará a que vuelvas.

lunes, diciembre 29

probabilidades

If I was under her gun


Leerías mi mente,
y con poca sustancia mis palabras se te acercarían.
Y las letras no se te acercarían, te harían compañía
o te circundarían quizá, y te hablarían
[pero no de mi ni de ti]


Verías dentro mio, pero no abordarías el espacio,
aguardaría junto a ti y seguiría tus pasos.
en la vanguardia de las tardes que aún faltan amanecer.

viernes, diciembre 19

(intitulado así)

Sin saber, en mis zapatos, sin conocer alguno, en mi lugar, sin dejar de admirarse.
[y quedarse colgado de tu mirada]

Abstraído y vagabundo en tus ojos que cuando quieren son casi verdes y cuando quieren son marrones, y cuando están sin estar, no están. El par de ojos tuyos que no se inundan en tu voz que se quiebra, que se quiebran en tu garganta que ríe. y que me miran, a veces sin mirarme y a veces sin decirme nada... y otras veces me miran solo por mirar.
[como yo miro solo por mirar tus ojos]


Y en tu piel, donde muere la mirada, destino cada una de las palabras que no diré, por el temor a dejar de ser mirado, por el temor que tengo a dejar de mirarte, mientras que después del después se mire la noche que atraviesa tus pupilas
[después de pensar sin pensar]
Sin saber lo que hacer. Perdido en tu mirada.


[Tu mirada de fulgores morados]
Donde te escondes a veces

martes, diciembre 16

Si de regalos hablamos...

Un día tranquilo

una tarde nublada

un café, un cigarrillo

un Libro de Joyce

Una banca en el Prado

Una canción de Charly

Una espera sosegada...

...solo faltabas vos

domingo, diciembre 14

Prosa inútil (Reminiscencia II)

"Por si te quedaban las dudas"


Si tuviese miedo, si tuviese al menos algo, algo que no fuera el vacío y la arena cayendo de los puños, si tan solo existiese algo más allá o más cercano. Al menos si supiera dar las palabras exactas en este pedazo de texto absurdo. Si tan solo... si tan solo... Si tan solo recibiera el acuse de recibo.

O tal vez siquiera el silencio errado, la melodía equivocada, o si tuviese tu sonido aquí entre mi pecho y la espada, entre la pared y mi espalda; si alguien te tuviese en este mismo instante. Si no fueras un hálito en la membrana azul.

Y solo tengo esta mirada perdida, el ánimo incendiario y papeles para quemar, que al menos son mejor que esta inútil prosa.

Sin excusas al portador de la misma

jueves, diciembre 4

Reminiscencias (I)

Ayer era abril, y por si quedaban las dudas era seis. Con lo que duele eso.

Tampoco fue para tanto, aunque si fue demasiado; ayer se hizo abril y también se hizo un canto.

Ayer cayó abril y también llovió en el interín, se hizo oscuro y se hizo claro, y los vientos han soplado, solo un poco. no es una perdición ni mucho menos; solo es una noche lenta que se asoma por el saliente.

Ayer era abril... y no recuerdo cómo era que el seis se robaba pupilas.

lunes, noviembre 24

Túneles

(I called her again and again, but something was missing)

Then I realized, it was only echoes in the light
Then she talked, then I walked, and then...
just in time...
She flew away

Dos certeros pasos, o tal vez más, es ahí donde perdió la certeza, y dos pasos consecutivos culminaron en el desencadenamiento de su primera visión que fue una construcción delusoria de un río, de los ríos que fluyen secos, de los ríos que retroceden robando su claridad al agua. Ante los pasos no dados, se quedó mirando el abismo del río y las piedras flotantes en el fondo de su visión.

Perdió los cinco minutos que alguna vez le fueron regalados, y al caminar comprendió y cedió el espacio que hubo ganado, y caminó en su voz tiritando de frío en el calor de la claridad del día que acogía sus pasos; alejándose, retiró la mirada del horizonte y la posó en el fondo de un vaso que se mantuvo inamovible, y una y otra y otra vez permaneció escuchando y flotando a medida que caía y se sentía caer, a la vez que flotaba.

Y el único pensamiento que atravesó la nubosidad fue una repercusión del sonido callado de sus pasos dirimiendo el sonido del viento.

I'll travel in your dreams

martes, noviembre 18

Summer Rain

We are the lost generation

"No arriesgues la vida me dijo un suicida"
-perdón por la rima, juro que no habrá más-

Tonight, we were drunk and stoned, society dropouts,
kings and queens, but outsiders in our kingdom.
We were lost before, before, before,
before what? before, before qué?
antes de hundirnos, antes de enfrentarnos con la realidad,
antes de chocarnos con el pavimento que hay debajo del puente.
Estábamos perdidos antes de hallarnos en la curva de la decadencia anunciada.

We shed blood, we shed tears, but we share anything at all,
Withdrawn cowards pushing buttons, sin mirarnos a los ojos,
drinking'n smoking, sin hablarnos
Chickenshits, conformes con bajar la cabeza, New Age losers,
Adictos al "Everything is OK", todos somos felices,
We're a happy family, me, mom and daddy, I wanna party
y las fórmulas fáciles

Tonight we need drugs and booze, we need "I-am-feeling-alive" pills,
to carry on.
We're going through the dawn, surfacing through the darkness,
para escapar de una buena vez de la realidad preconcebida por nosotros,
inmersos en esas "drugs" y en las botellas de "booze" para hacernos a los fuertes.
e inventarnos una realidad "wannabe", donde nos da miedo sentirnos solos,
aislados, outsiders, clochards, que destilan sus venas a cambio de socializar sin comunicarse. Necesitamos esas excusas para jugar a los espejismos "Mirage".

Un espejismo de beso, un espejismo de acercamiento, un Mirage de disposable love,
un one night stand y la ilusión de que pasarla bien es ser felices.
Saturday night mirage, o los viernes 3 AM, y las excusas para no llorar

And cry, baby, don't drop tears in vain. porque cuando todo el efecto haya pasado,
you'll be back, with a happiness hangover and wishing to be dead, o por lo menos drunk again. stoned again, y fuera de este lugar que te angustia...again

But don't worry, el fin de semana you'll be out again, y olvidaras por otras 4 horas que no eres más que un generation x outsider, un little piece of shit que no sabe cómo moverse en un mundo descartable.

martes, noviembre 11

Sin espacios

En mi atrevida incursión por los absurdos lugares,
soy nada más que un fantasma que busca una cicatriz
por la cual colar mi silencio en tus ensueños.

Y tal vez dormir tranquilo en tu regazo,
mientras una y otra vez me escondo en los ángulos
de un mundo que ninguno de los dos conocemos.

Entre los contornos de un momento que espera,

busco
tal vez ser y hacerme una palabra

que emule el silencio absorto con el cuál te miro;
desde el cuál intento asirte con cierta celeridad.

Y despertando una y otra vez,
o invadiendo un mundo en que tal vez desaparezco,
busco incesantemente poder aniquilarme al cerrar los ojos
apareciendo en un lugar que no conozco-
empeñando de nuevo el salto hacia la nada,
con el miedo de estrellarme de nuevo en el subsuelo
de tus pies desnudos.

De nuevo en el infinito, en la pendiente de la caida,
al sentir una presencia que me vacía por un instante
-te logro ver en la luz ausente y en la oscuridad-

y en el ruido, y en la frecuencia de tu voz,
ondula mi presencia en el magnetismo ciego de un cálido aliento.
En un instante que se arremolina a mi alrededor,
-alrededor de mi fantasmática presencia- apareces,
y abrazas mi ser etereo, y no puedo huir,
y si huyo me encuntro dentro tuyo.
-y no quiero huir más-

viernes, noviembre 7

Así de Simple

Sonreir, como tonto, como estúpido... como a nadie le gusta hacerlo... como a todos les gustaría.

Así de simple. simple y llanamente.

jueves, octubre 30

El día que Carolina palpó la membrana de su Sueño

"Navegare necce est,
Vivire non necce est."

Los faroles iluminaban con cierta complicidad la noche en que Carolina escapaba de su celda, y si mientras tanto, se sentía de nuevo huérfana, su noche se convertía en una blasfemia para las buenas costumbres familiares que le habían inculcado durante toda su vida -su corta vida- La noche se teñía de un azul cobalto de brillos extraños, se iluminaba con brillos no presentidos de su corazón tricolor que se debatía entre la angustia y la desesperación; porque a partir de esa noche, Carolina sabía muy bien que no podría volver atrás y tenía que continuar caminando sin tornar su vista hacia lo pasado, sin vislumbrar ninguna frontera a partir de ahora, siendo el único límite su propia libertad, ese espejismo del que había desertado después de negociar una vida cómoda. “Quemar las naves Carolina, conquistar tu propia sangre o morir en el intento” eso le decían las voces que la acorralaban; la voz de Clara, la voz del hombre callado, la voz de la hija del viento, la voz del cíclope: sus voces, el blah blah blah que Carolina asentía con un amén cerrado en la boca.

Carolina caminaba por la vera del río como buscando algo –como caminar por la cornisa de un ávido sentimiento de plástico y un ligero presentimiento de nocturna compasión- una búsqueda del objeto de contrabando que le habían prohibido a plan de ganar algo que ella no sabía que había deseado alguna vez. Los gatos, los sueños escarlata en la cómoda cama del hogar de la señora de la desesperación; Carolina se sentía en quiebra, y la amedrentaban las canciones que le enseñaron a seguir adelante buscando lo que jamás encontraría "Carolina, si vas a seguir adelante, busca aquello que jamás encontrarás, no importa lo que sea, busca aquello que quieres, aunque mueras en el intento". Pensaba en la muerte, la confusión, en las víctimas de un cielo azul que se come a sí mismo y vomita noches que nadie espera, esas noches lluviosas que se cuelan consumiendo lo pecados de soñar algo más que la estúpida seguridad; las noches violentas y frías, abusivas; esas noches sujetas al aroma meloso y empalagoso de los sueños de Carolina.
No quería mirar más atrás, lo demás ya no importaba; ni lo que estaba perdiendo, ni lo que ya jamás volvería a tener, empezar de cero dos horas después de que el alba empezaba a rozar el horizonte, caminar, sin nada que perder, sin nada que ganar, reptando por las mañanas entre el desvarío que limita la locura de aquellos que sueñan con rehacer su vida. Quería olvidar el despertarse abrumada, asustada y fría, olvidar esas mañanas en que sentía que no despertaba, zarpar de nuevo en las naves que la llevarían al otro lado donde podría ser lo que le habían prohibido ser de este lado del mar, arribar y quemar las naves.

A partir de las seis treinta de este día en que ha logrado escapar y se ha hecho un ángel caído, para ella todos somos un rebaño de sueños luchando por subir y jamás bajar un escalafón que tapona la fantasía; somos un sueño en el que nos vivimos, un coma del cuál jamás despertamos, en el cuál vivimos, hablamos, cogemos, lloramos, reímos y nos sentimos tranquilos sin afrontar nuestra verdadera existencia, un coma que nos receta una vida para liberarnos de construirla a plan de dejar morir nuestra comodidad; solo un estado de coma que nos suelta un velo para no ver nuestra realidad vacía y nuestra tan vacía vida. Pero ahora, para Carolina, lo vacuo no es molesto, ella sabe muy bien que tenemos todo por delante, aunque estamos entre la espada y la pared; una disyuntiva en la que no hay más que ir hacia adelante, hacia la espada, hacia la sangre que se derrama del pecho y el dolor punzante que alimenta las ganas de seguir, y seguir y emprender el vuelo haciendo que el filo atraviese de una vez por todas nuestro cuerpo entero, y así, a riesgo de perder la vida, seguir adelante. La vida es lo único que tenemos para apostar.
Carolina ahora camina en un réquiem para la noche en que dejó la pasión por la ruina, por aquello a lo que los demás tememos. y llora de alegría por haber atravesado y vivido en el tango de una noche evanescente que se derritió cuando ella decidió amar sus propias fantasías, las cuales la llevaron a alejarse de la vida que los demás aconsejan, cuando optó por dejarse navegar como un velero a la deriva.

Esta mañana Carolina no ha despertado, y un silencio habla en su pecho manchando al amanecer de un grito ansiado de la libertad que el mundo se había encargado de arrebatarle.

Carolina, verso de frío en el racimo de ilusiones que personifican la nada, al otro lado del apagón del mundo, en el lugar de sus canciones, en la mística imaginaria de un punto final. Carolina ahora respira tranquila.

sábado, octubre 25

Por Favor (y no te vuelvas tan loca)

La resaca de todo,
el mundo y sus esquirlas peligrosas
un blues, un Rock'n Roll, tu voz
y un La sostenido que destila su timbre en la luz
del reflejo de un espejo.

Las semanas de la vida sin aniversarios,
ni viernes ni sábado,
ni domingos tristes,
ni feriados nacionales.
solo el distante sonido de la resistencia incógnita,
en tu voz de jueves por la noche.

Y tu voz, pequeña escondida detrás del muro
donde chocas la cabeza y también te escondes,
tu voz desde la que sonríes y mirás alrededor
para buscar quiz´el sol o tal vez la noche.
-tu voz en el exhalar de la noche-

y de tu voz que se desprende el péndulo,
de lo alto en el ocaso del techo,
de vos que respiras y trasluces los reflejos.
de tu voz se estremecerá un sonido
-que se colará por las ventanas chirriantes-
y un grito, y vos, por último, pero al principio.

Y nunca de vuelta a mirar para atrás

(Hermana gemela perdida, con dedicatoria para vos)

domingo, octubre 19

Us and them

Comenzaron a envejecer, y observaron sus reflejos en el manantial del hambre y la espera, y en cada pliegue de la piel recordaron a sus muertos. Entre el sol que regaba el zaguán se podía escuchar que una oración se levantaba de sus labios fríos, de sus bocas en la tarde tibia de la pequeña melancolía. Y sin pensarlo, como un escape hacia un cielo de pseudolibertad, se entregaron al recuerdo, cuando ya no había nada más que hacer, nada más que pedir, nada más que perder ni nada más que ganar.

Surtió efecto entonces la dosis del mar que congelaba sus ideas, surtió la alquimia de un dios decadente de la espera, el mismo dios que los adormeció mientras unos brazos invisibles e indisolubles se arremolinaban víctimas del impulso que los llevó a olvidarse mutuamente mientras estaban juntos; mientras comenzaba un breve torbellino en su peregrinar de renacer en la sonrisa que los devoraba poco a poco. De cara a las llamas de un fuego estruendoso que inventaba las palabras que no se dicen, y las caricias que no se dan, en los besos que no existen, frente al fatuo fuego, fueron fuertes mientras sus cenizas de hueso se rodeaban mutuamente; y uno, y dos, y tres tormentos y quizás más, pudieron oírse en sus labios, pero ya nadie pudo borrarlos del amanecer en el que se pintaron el uno al otro en los colores que eran el más vivo reflejo de aquello que más los hacía temblar en el anochecer.

-¿quién eres tú?-
-soy quien desde hace tiempo te ha buscado-
-no soy yo lo que buscas-
-si no eres tú, no hay nadie-
-no hace falta, yo también busco a alguien-
-permitirme amanecer en tus brazos, mañana ya veremos qué hacemos-
-estás mal-
-tu también-

Y envejecieron juntos durante ese instante, intentando realizar en palabras lo irrealizable, intentando nombrar lo innombrable cantaron para alcanzarse mientras sangraban el uno en los brazos del otro. Hacia el alba que despuntaba por la mañana, sus voces en melodía crujieron en un reflejo de rayo de sol que se coló por entre las nubes de lluvia; y los pliegues en la piel les recordaron que cuando es el final, todo ha terminado.

martes, octubre 14

Loca tuca de Dios

Lo que tengas ahí necesito besar
tu sonrisa sin fin y mi miedo mortal
ya lo sé, ya lo sé, no te quiero cansar
con mi tango feliz, con mi herida letal
y así fue, fue que pasamos la vida…
Locos


¿Y qué más te puedo decir? que me rescates no me sirve, si ya no sé ni nadar, si lo pienso mejor, ni siquiera sé navegar.

ya lo sé, ahí tú estás... esperando por mi... o volando quizás,
y otro día será, no te pienso olvidar,
que un momento de ser, lo mismo que se fue algún día.
entonces añorar que nada más moriría...

¿qué mas te voy a decir? no me sirve ni hablar...

domingo, octubre 5

Disgresiones

los mismos elementos del ambiente, diurno, taciturno, lo mismo, los mismos colores...

Él se metío dos tiros en la sién... el primero acertó, pero el segundo era por si acaso el primero fallase, pero no falló, aunque el segundo siguió siendo necesario. Comenzó entonces a verse por dentro, el agujero de entrada quemaba todavía, el agujero de salida estaba demasiado húmedo, pero por dentro se sentía fresco; se miraba y para él estaba más vivo que nunca.

Se metió al baño, la fiesta seguía y nadie lo vio entrar, tampoco salir; dentro comenzó a pesar un poco el aire, luego el ambiente y después la libertad, ya era mucho decir, obviamente, nadie lo vio entrar. Al cerrar la puerta no oyó el chirrido de los bajos en los vidrios, no oyó nada, solo palpó el extraño vaho que se colaba por las rendijas. Sacó su libertad de los bolsillos y se rió del mundo... en realidad mandó el mundo a la mierda como dicen algunos.

Y mandandose a la mierda en el espejo, y mandando a la mierda al mundo y mandando a la mierda a la fiesta sin fin en la que vivía, despertó del sueño y puso los pies ´desnudos sobre la loza fría. y sonaron dos tiros, uno: bang! sono destilada la habitación y la sangre, teñida de su respiración... se rió un poco y se colocó el caño en la sién de nuevo... Bang! y luego el segundo, se sentó a esperar el efecto.

y está ahí sentado, comenzando a sentirse aburrido y liberado

lunes, septiembre 29

Confesiones de la oveja descarriada

Para variar son las 2 de la mañana...

Para variar son las 2:40 de la mañana y esto se va poniendo estúpido

para variar son las 2:41 de la mañana y alguien está asustado de aceptar que está triste.

Para variar son las 2:47 de la mañana y temo volver a preguntar si ya es demasiado tarde para aceptar que yo soy alguien.

Para variar son las 2:48 de la mañana y acabo de escribir la confesión más estúpida.

miércoles, septiembre 24

Ariana

-Hermana de la silenciosa espera-

Me hallé con sus ojos que recorrían mi faz, mi cuerpo, mi máscara y mi corteza; y me encontré en lo vacío, me hallé en la vacuidad frente a un enigma en sus pupilas, un enigma que me retrataba en un reflejo cristalino que se veía como yo, y aunque sé que no existo en esa imagen, en sus ojos aparecí de nuevo, es decir que desaparecí en el vacío.

Y sus ojos devoraron algo en la imagen absurda de mi imagen incompleta, y vi algo mío que aparecía en el borrón de un frío que me contuvo de soltar una palabra que apele a su mirada; y en la melancolía del mismo segundo en que fui velado por aquello que mostraba una luz de destello, caí en la existencia de mostrarme desnudo ante el vacío; un vacío que consintió mi existencia, una vacuidad que me permitió ser.

Y trastocado por esa palabra no articulada, en su mirada, perforado por el segundo de melancolía de sus ojos, caí al vacío en un instante.

Entonces Ariana bajó los ojos y pasó de largo llevándose mi pesar.... dejándome sus miedos

domingo, septiembre 21

Vox

En lo alto una voz
-debajo tuyo habrá una voz-

Hoy llueves,
a lo lejos llueves.
Y cuando te acercas a descubrirme,
o cuando despuntas al alba;
llueves.
-debajo tuyo una voz-
solo llueve.

Al llegar el día
llueve; y gota tras gota
la lluvia me habla
-debajo tuyo la voz me habla-
y si llora la lluvia.
solo me habla,
gota tras gota...
Me hablas tú.

En lo alto una lluvia
-por encima mío habrá una voz-
la voz tuya,
tu voz que llueve.
Tú que llueves,
está de más, y no es suficiente.
tu voz, solamente en la lluvia

que mira al despuntar el alba.

tu voz, llueve, tu voz.

domingo, septiembre 7

Shhh

Di:
fuiste tú
o fui tan sólo yo?
(Antonio Ávila Jimenez)


No me agradaba mucho el silencio, pero lo amaba; sobre todo cuando me encontraba al lado de la chica extraña de los ojos tristones, lo amaba entonces con todas las fuerzas que se me permitía desde el matiz de sus ojos. Y me agradaba entonces el silencio, y me abrumaba y me admiraba.

Amaba, no su silencio, sino el silencio que entre los dos brotaba, porque me permitía escuchar sus palabras que navegaban, esas palabras que no salen de los labios de nadie, sino que van flotando y se agarran de los espacios vacíos en los que se cuela el silencio.

El silencio ahora es eso, un silencio, una armonía que se desprende a toda prisa de los espacios vacíos, una melodía dispareja.

Es donde se cuelan todos lo vacíos

jueves, septiembre 4

Hipotético

La decadencia solo nos está permitida de aquí hasta la punta de tus dedos, en el lugar en el que te interroga tu propia boca; y después, entre nuestra realidad, no necesitaremos más de nada, porque nos habremos elevado en un claro silencio en el que creemos que vivimos, pero en el que en realidad solo perduramos por un breve tiempo

Qué poco conocemos entonces del miedo, que en cada grito y en cada cicatriz gira y se esconde en cada sitio donde nos escondemos nosotros, porque no es nuestro el miedo, sino nosotros somos tan suyos como lo es nuestra propia vida; y habita en nosotros gobernando nuestros pasos, o es en realidad que nosotros habitamos en el miedo que gobierna nuestros pasos.

Pero el vivir atemorizados nos está prohibido, porque el temor no va a ser lo mismo exactamente que el miedo; y tu y yo, que en realidad no es un "nosotros", conocemos muy bien el temor porque sabemos muy bien que el miedo es completamente deleznable, porque tanto tú como yo tenemos los bolsillos colmados de una sensación de estar juntos, pero en realidad no lo estamos, y tenemos miedo.

viernes, agosto 29

Brillos no presentidos

Voló entre tu espacio de luz rasante por el horizonte en el cual despertabas, atravesó tus brazos portando su ceniza y brillo que se iba opacando en este tiempo olvidado, voló cerca a tus labios de trayectoria fugaz, y la luciérnaga durmió tus ojos.

Calló su canto de silencio que te hizo reflejo de reflejos mudos del ocaso, calló por su vuelo y se transformó en noche, y se transformó en noche su vuelo que grabó en tu piel y en tu pelo su estela de suavidad azul; y en noche convertida, se entregó a tu pecho la luciérnaga que durmió tu aroma que desbordaba en amanecer. Calló tu vuelo, brilló tu ocaso.

Anidó su crepúsculo y su canción desfigurada en medio del rincón más recóndito del frío espacio, en la tibia lágrima apareció lavando su luz atesorada y resquebrajada; y entonces, supo por un instante, por un segundo fugaz y sempiterno, que tu palpitar era su sueño y su hogar. La luciérnaga brilló en tu letargo, cuando emprendió vuelo contigo a través del quebranto de una noche que el brillo se exponía a la expansión de un universo finito clamó tu sueño. Y su voz se dejó escuchar por toda la oscuridad del poniente.

Vibró su pecho lleno de ti, entonces comenzó por última vez el fulgor de todas las luciérnagas que soñaron tu dormir, y alguien en medio del mundo concebido desde tus ojos dejó de soñar tu sueño, alguien que durmió tus ojos, alguien que se quedó en el brillo de tu vuelo, alguien que trazó la fugaz luz de tu noche.

sábado, agosto 23

no more... or just a little bit

Aullido detestado del viento de un atardecer que baja del cielo.

Ella no sabe que la miro a través del espejo, pero ella sabe que la observo, y se mueve con gracia, y sonríe con soltura, y flota en el espacio... ya que sabe que la observo, pero piensa que yo no sé que ella se ha percatado de que la observo. Pero ella solo sonríe.

Ella me habla y yo no sé si ella me habla en serio o es mi mente que hace que la escuche en cada instante en el que creo que me hablara; ella me mira y sé que ella me observa, que me toma entre sus brazos y calladamente me duerme por las noches mirándome escapar. Ella sabe que esxisto, pero no sabe aún que estoy muerto.

Ella en su ternura me acoge con dulzura y con sus gentiles maneras, ella no sabe que ya he partido, y aún cree que estoy hablándole al oído, y me duerme calladamente como yo espero a que ella cierre sus ojos para hacerme su sueño

-pero yo no sabía todavía que ella había muerto-

domingo, agosto 17

tú que te miras al espejo (lee esto)

No te sirve hablar más, porque lo esencial no es invisible a los ojos, sino inservible para tu vida.

Vida de comodidad, seguridad, certeza y razón, verdad, blanco o negro, éxito y asertividad, trascendencia y ascenso. ¿puedes llamar a eso vida?.

¿Cómo llamarla entonces, si ellos te han dicho cómo hablar, cómo actuar, cómo pensar, cómo reír, cómo llorar, cómo sentír, cómo expresar, cómo abrazar, cómo besar, cómo coger, cómo querer, cómo amar, cómo vivir y cómo morir?

No me convence tu mundo de certeza absoluta, de angustia y de una pseudolibertad; no me convencen tus discursos de crecimiento personal, de persecución de metas superiores, de santidad y virtud; no me trago tu ilusión del edén y la perfección de tu alucinación llamada felicidad, no comprendo tu paraiso inventado, tu vida de jardín de rosas y primaveras; no creo en tu polaridad ni en tu complementariedad de opuestos, ni en tus valores ni en tus morales, tampoco en tus ideales ni en tu filosofía, y menos aún entiendo tus respuestas y razones a las preguntas que te haces al momento en que naces a la muerte.

Querido(a) domador(a), me enseñaste a seguirte y copiarte los pasos; me entrenaste para que olvide mi ser salvaje y arisco, pintaste mi piel para que se parezca a la tuya, y a simple vista tu y yo somos completamente iguales; me sacaste de la fría estepa para que conozca tu progreso y tu orden, tus artilugios y facilidades. Me domaste y me domesticaste, has hecho de mí un animal dócil que baja la cabeza cuando se encuentra delante de muchos de los tuyos; y cuando un crudo rugido crepita en los límites de mis fauces, tú tapas mi boca con alguno de tus látigos disimulados... y me enseñas a hablar, me enseñas a actuar, me encajas formas de pensar, me dices cuándo reir, y cuándo llorar, me muestras cómo tengo que sentir y cómo lo voy a expresar, me abrazas para que aprenda a abrazar, me besas para que aprenda a besar, me muestras cómo puedo coger, para coger como tú, me dicés cómo y a quién querer y me enseñas sobre el amor, me dices qué ha de ser lo esencial en mi vida, y me dices cómo tengo que morir.

De aquella mi fría estepa, el gélido lugar donde todo "es" sin necesidad de que alguien se pregunte el porque es así, solamente cargo con mis ganas de gritar que no quiero ser como tú...

Pero me angustio como tú, busco la comodidad como tú, me trago tus mentiras, porque ya no sé en realidad lo que soy... soy, no sé si un frío lobo solitario, o un dócil y acequible cordero.

¿Quieres saber el sentido de mi vida? Pues el único justificativo a mi vida es la muerte, y el único justificativo a mi muerte es la vida. Porque lo que en realidad busco con fruición es la vida, no esa tu existencia tranquila y somnolienta. y esa vida que busco, no existe.

-Equivocado otra vez, cabeza baja, aceptación y paso adelante, pero gemido hecho aullido noche de luna llena otra vez, equivocado-

existir... durar... perpetuar...

-la razón es la de ellos, porque ellos siempre ganan-

viernes, agosto 15

la noche del lobo

El lobo ambula más y más solitario cada momento, mira a su alrededor y las ovejas se ríen de él; está demasiado domesticado, es demasiado dócil para atacarlas, y cada momento se asquea de su imagen. Es tan solo uno más de los de su especie.

Y es que en realidad soy un lobo que habita entre ovejas, un ser salvaje y arisco que ha sido domado por esas tantas voces que hoy siento como mías, esas palabras que no me pertenecen, pero palabras que ahora son tanto mis palabras como las suyas.

Mira su reflejo en el agua que bebe, cada pequeña partícula de su ser difiere enteramente de los otros seres que están a su alrededor caminando, ambulando, comprando, viendo, escuchando, consumiendo, obedeciendo, obedeciendo, obedeciendo, obedeciendo; y el también sabe que está obedeciendo, mientras mantiene las fauces apretadas para no morder, para no gritar, para no aullar... el riesgo es que pierda esa comodidad. La comodidad de no pensar por si solo.

Ya debe ser tanto tiempo que recorro este prado, que he olvidado la fría y muerta estepa de la que provengo, ellos no son los míos, yo no pertenezco a este lugar, pero es cálido y a veces acogedor, pero yo no soy de ellos, no soy su mascota, aunque me acarician la cabeza, me dan de comer y hacen que piense que soy especial, cuando se bien que no lo soy; hacen todo eso para acomodarme, para consolarme, para domarme; para que no me pregunte qué hago yo acá, para que otros de los míos tampoco puedan pensar, para que no podamos huir, para que no logremos alcanzar una libertad que no existe

El lobo es tán absurdo, y bebe el agua, sabe que por más que se queje no hará nunca nada para cambiar su forma de vivir, no buscará más allá... porque teme perder.

jueves, agosto 7

Kein Zurück

Deberías desprenderte por un momento de esa tu eternidad y venir a solapar esta mi existencia; yo debería desprenderme por un momento de mi realidad y seguirte los pasos.

Pero ya no hay vuelta atrás...

Y si solo por una vez pudiera dar vuelta al reloj... Kein Zurück

sábado, agosto 2

Imagen al tacto

A Polífemo le sangra la vista.

Galatea no era el cielo, ni el silencio, ni la lluvia; no era trino de albas eternos ni rocío de noches efímeras; no era canto de luna ni metáfora de crepúsculos tibios; Galatea era suave armoniosa y bella, escribía en las paredes, escribía con voces que retumbaban un blanco espesor de la niebla, cuando ambos (Polífemo y Galatea) solían ser libres.

Galatea era la rebelión, y sus manos se empeñaron en escribir historias que escriben solamente aquellos que callan; después de todo, Galatea era una mujer que nacía cada día, y se elevaba en el denso aire que respiraban los demás seres que como ella se encontraban atrapados en la respiración artificial que nos impone el mundo. Galatea solo escribía su voz, sin palabras, sin frases ni versos, Galatea escribía en las paredes sin la necesidad de escribir.

Polífemo busca con fruición las imágenes que quedaron grabadas en los muros de piedra... lo que pase después, es solo cuestión de tiempo.

-Polífemo teme darse por vencido-

lunes, julio 21

En retrospectiva y sin la negación (para salir de lo acostumbrado)

Pues, a decir verdad, no soy muy proclive a escribir estas cosas, no me agrada hablar sobre mi mismo (y hablar del espacio sin lugar ya es decir mucho) pero como que ya era tiempo de que le haga una breve retrospectiva a este lugar, pros y contras, logros y falencias... ya tiene más de un año, y la verdad me parece que quiero hacerlo.

Hoy me siento como el peor gusano de la existencia completa, mi autoestima me obligó a escribir eso. Estaba revisando las cosas que he escrito desde el Marzo aquél que se me ocurrio la idea de abrir un blog, y es interesante ver cómo el uso de palabras y demás artes gramaticales han ido mejorando con el tiempo... es agradable ver que han madurado; sin embargo el que no ha crecido nada he sido yo, a los escritos les falta creatividad, les falta explorar a mis escritos (o sea a mi mismo me falta eso). El mismo distímico tema de siempre, el mismo reflejo de lo que pasa dentro mío... a veces pienso que escribo más pero no mejor, a veces pienso que debería escribir sin ser excesivamente introspectivo.

Hasta hoy, creo que es suficiente por un tiempo; este es el lugar que se ha convertido en una especie de electrocardiograma del imbécil que escribe, del cobarde, del pobre narcicista sin autoestima. Y creo que seguirá asi, no prometo más, ni menos... solo que quiero seguir escribiendo.

gracias a las personas que han estado leyendo todo esto que escribo, a las que comentan, a las que pasan sin comentar...

Eso.

domingo, julio 20

A Mirror

-I can't, I just can't-
(The man in the mirror)

Por favor, solo te pido una cosa,
sácame de ese espejo,
Por favor,
ya no aguanto observar siempre el mismo reflejo.

Ahora que dibujas del otro lado del frío vidrio,
ahora que el color de las luces reflejas en tus ojos se ha desvanecido,
ahora que todo parece haber desaparecido.
ya no quiero seguir siendo ese tipo que aparece en el espejo,
no quiero parecerme al hombre que se refleja en mi reflejo.

('cause we all die young)

viernes, julio 18

Dawn Patrol

Cuando pasaron los días de la ira, algo se removió en la blanca hoja que amanecía por la mañana; el aroma a luna llena y el calor de las visiones abrazaron la última reliquia que guardaba en lo más profundo de un sueño solapado y enmascarado. Y pintado de oscuridad me puse a caminar buscando el silencio de las mañanas acostumbradas.

Las respuestas a las preguntas que me hice, flotan en la atmósfera y el viento las sopla, por más que no entienda, la luna habla, canta, pero no escucho. Al llegar el día del brillo incandescente, la mañana se desvaneció... maldita luna llena.

Y como un sueño por la forma más facil y segura de despertar, se esfumaron las imágenes y los sonidos, los aromas y las sensaciones y quedó el cansancio y la respiración pausada, inhalar, dolor, exalar, sangre. y no hace falta volver a amanecer... cuando la mañana decaiga de nuevo, algunos estaremos protegidos en la oscuridad.

lunes, julio 7

Encarcelar

Porque yo soy la piedra y la cadena
el grillete y la condena...
... pero hoy voy a dejarte ir...

por siempre.


CHAU

martes, julio 1

Sísifo (un estúpido ser humano)

Hoy, que a uno se le ocurre despertar y encarar de nuevo la vida, a uno se le ocurre que todo esto no es más que un absurdo.

Uno no posee ni su propio nombre, ni su propia historia, ni sus propias decisiones, todas las palabras que nos describen son las de los demás... y lo oculto, hoy ya no tiene nombre.

Uno se pasa la vida buscando algo que no sabe lo que es y no sabe para qué lo busca, nos dicen qué pensar, qué soñar, qué elegir y qué esté mal, nos dicen en qué creer y lo que vamos a desear, nos dicen qué hacer y lo que no debemos imaginar, nos dicen lo que debemos decir y lo que tendríamos que lograr, nos traen a un lugar donde no pedimos venir, y sin embargo estamos aquí, pateando una vida adelante; una vida que jamás será nuestra. Somos solo una extensión de las palabras y los deseos del otro, dígase sociedad, padres, amigos, amores, enemigos, no existimos si no somos lo que ellos dicen.

La vida es aquella repetición de eventos inútiles absurdos y carentes de sentido, que se repiten más por la fuerza de la tradición que por un significado que exista. pero los demás te dicen que vivas, y jamás te explicarán el por qué y el para qué, y se lavan las manos otorgándote a ti esa responasbilidad. porque ellos tampoco se saben responder a si mismos. Aquí es donde nos suicidamos, pero no lo hacemos para no defraudar a los otros.

Pero a la gente le gusta existir sin darse cuenta.

viernes, junio 27

(sic)

...Esta rabia de querer estar contigo y que la realidad diga lo contrario

¿Qué eres tú ahora?

Un ligero silencio que susurra una voz dormida,
un recuerdo, una tumba, una flores secas,
una palabra estancada, una palabra podrida,
una sonrisa que ilumina un lugar que ya no es.

Un sonido, una brisa, un cálido suspiro,
un deseo carcomido, un otoño prematuro,
una fina membrana que ahora no me atrevo a cruzar,
una parábola que no termina jamás.

¿Qué soy yo ahora?

Un despojo de palabras que hablan del viento,
un azar frío que camina en dirección desconocida,
una soledad hecha pedazos por el amanecer,
una herida que sangra al despertar.

Una voz apagada, un aliento a tabaco y desesperanza,
un inmenso desierto sin oasis,
unos huesos que te echan de menos al atardecer,
un corazón podrido de latir.

¿y...?
Somos, no más que una canción que pasó de moda,
la tristeza de cada despedida no anunciada,
el llanto, la lágrima y el desagarro,
esa rabia de querer, y las ganas de gritar.
Abriendo heridas por donde el dolor pugna por salir,
por donde escapa el grito apagado...

...te extraño demasiado

miércoles, junio 18

Esta noche...

Esta noche voy a dormir y esperar que el viento me arranque del ruido que conjugado con su partida se hicieron cargo de mi vida; esta noche voy a rendir mis ojos que están mojados todavía y cansados de buscar y buscar en los más finos horizontes un solo recuerdo que me sostenga y me eleve.

Una noche como la de hoy, se dibujaron sus facciones en el cielo, que no era más el mío ni el suyo, sino el nuestro; por eso esta noche busco dormir para volver a pintar esos dibujos que sus manos diagramaron en medio de un silencio que se ha llenado de puras palabras desde que no está.

Esta noche voy a dormir un delgado sueño sin imágenes ni sonidos, solo el agradable susurro de su voz limpia que ríe en mi memoria con cada tarde que el sol brillaba; un sueño que no es más el suyo ni el mio, sino el nuestro; aquél que abril nos arrebató un domingo por la mañana -cuando no pude oir esa voz que me llamaba- Esta noche voy a dormir y no quiero que nada me despierte; eso y más, su respiración, la mía, la nuestra y todas esas cosas que se cuelan por la ventana cuando entorno el viaje de regreso su lugar.

Esta noche voy a dormir y si acaso no despierto, no sacudan mi cuerpo, no me hablen al oído ni repitan mi nombre, no tienten el pulso, no miren en mis ojos, no me pregunten ni me escuchen con fruición, porque todavía no me he ido, solo estoy dormido. Y si tal vez despierto, miraré el amanecer con tantas ganas de encontrar distancia que buscaré caminar en dirección de los sinos que se empecinan por huir de mi, miraré debajo de las piedras por la fuerza para continuar y si tal vez la encuentro, respiraré sin eludir su recuerdo nunca más.

Esta noche voy a dormir, y esperaré estar a tu lado de nuevo, aunque solo sea por un segundo, aunque ya no sea lo mismo de antes; voy a dormir y a dejar que el viento se lleve el polvo y las cenizas, para que al despertar solo el brillo se haga presente.

sábado, junio 7

Hoy por hoy (dos meses y contando)

Hoy quiero estar de nuevo en tu regazo y respirar de nuevo esa profunda melodía que manaba del viento que se filtraba por tu pelo suelto, respirar quizás un poco de la respiración que inspirabas en la comarca lejana donde escapábamos, o parar el tiempo mientras la suavidad de tu voz se hace un perfecto arrullo que fluye con delicadeza a través de la atmósfera. Tu melodía y hoy por hoy el recuerdo.

Hoy quiero estar de nuevo surgiendo a tu lado entre los cálidos días del mejor verano que haya vivido, de aquél verano que nos regalamos mientras tocábamos las flamas de un silente deseo de permanecer juntos unos cinco minutos más, hoy quisiera estar tan lejos de este mundo de sombra y fantasmas, hoy quisiera que vayamos a todos esos lugares que sintieron nuestros pasos suaves que compusieron un mundo en sinfonía para dos manos entrelazadas hasta el final. Nuestra melodía y hoy por hoy tu recuerdo.

Hoy quiero estar en ese lugar que pudiera ser para cualquiera, ese lugar que se construyó de la nada entre un silencio inventado que fue el sueño más notable de un encuentro que no sucederá jamás; y confieso que cuando despido al sol poniente anhelo que pudieras estar a mi lado para que digamos que aun no es tan tarde, que todavía hay tiempo para estar juntos, que todavía queda un segundo más que se llenará en un abrazo y en un diáfano "te quiero" que nos devolverá a la tierra a la que pertenecemos, ese lugar al que nunca perteneció nadie más que un par de locos que se conocieron por algún lugar donde no pensaban ver jamás una luz; un lugar extraño del cual no hablaron ni cronistas ni poetas, un lugar al que le llamaríamos hogar... algún día. Las luminosas mañanas y hoy por hoy los restos de un sueño.

Hoy, que en mi trasnoche de frío y nostalgia ya no le temo a la sangre, quiero volver a para que tal vez puedas volver a mi, o quizás encontrarnos en el último hálito de luz crepuscular que nos revista de nuevo de ese poder imperceptible que nos unía y nos hacía libres el uno con el otro; ese haz de aroma extraño que nos dejaba volar por lugares inhóspitos a los que les otorgamos parte de una vida que con facilidad salía de nuestros pulmones. Hoy que tengo ese vulgar sentimentalismo de extrañarte en cada lugar que me pregunta de ti, quiero resumir estos días que pasan y vuelan tan faltos de ti, tan faltos de un nosotros; hoy solo quiero que mañana llegue para que tal vez, y al cruzar ese más allá que separó tus besos de frente y mis caricias de mejilla, nos encontremos de nuevo y caminaremos en dirección de la constelación que crearemos algún día en que nos hallaremos de nuevo.

De mi voz y hoy por hoy, mi llanto hecho canto que te acaricia aunque ya no estés aquí.

sábado, mayo 24

Las horas pasan...

Nous aurons pour nous l'éternité
Dans le bleu de toute l'immensité
Dans le ciel plus de problèmes
Mon amour crois-tu qu'on s'aime

(L'hymne à l'amour - Edith Piaf)


Camino en este lugar que se rompe en la medida en que mis pies lo tocan con la suavidad con la que llegó un silencio que era ella -ese silencio que nos acorralaba y nos unía- Ese dilema no me permite escapar y procuro seguir caminando para que no me encuentre la luz, para que no me encandile.

Y aunque la luz me encandilase, y cada segundo se amontone en este espacio vacío; la puedo ver en el resquicio más profundo de la luna efímera, cuando elevo mis pasos con el viento de cada susurro puedo sentir que a pesar del a pesar, que sin importar lo que no importa, ella puede verme... y camino los pasos que nos faltaron por andar.

Entonces llegan las noches y llegan las lluvias que llueven de luna los prados donde habitamos, donde habita un futuro con nombre de esperanza; y todavía puedo contarle los cuentos que algún día le pude contar, esas historias que aprendí a diagramar a su lado, entonces llega el silencio y llueve de luna la lluvia de la tristeza, y le hablo en la bruma, donde quizás pueda escucharme.

Le digo que ya pronto llegará el mañana... y seguiremos juntos al sol.

domingo, mayo 18

La oscuridad

Galatea no está.

Polífemo asume la búsqueda en su ceguera, camina sin rumbo alguno; consume un aire que se le antoja extraño y el dolor de la herida es demasiada carga. El aroma del mar se siente tan distante que a momentos cree que va a abandonar la búsqueda, pero no se resigna.

El primer frente frío se ha ido, Polífemo siente la bruma que le obstruye la luz del sol, pero no ve nada... Golpea con furia el suelo y se arrodilla con esa sensación de estar perdido, se siente perdido ahora que Galatea ha dormido un sueño del que no va a despertar.

El agua los separó aquella mañana en que Galatea olvido quitarse la escafandra mariposa con la que volaba, Galatea se trepó a las palabras que manaban de sus arterias y tachó el mundo con los dedos; escribió en medio del cielo una frase que cegó el único ojo de Polífemo -el cíclope que encegueció- La pobre mañana que amaneció de un sobresalto fue dibujada por Galatea en un sueño de poema claro, Polífemo no supo cómo llegar hasta ella, ahora la echa de menos.

Polífemo está ciego.

viernes, mayo 9

Lo que nunca...

Todo está bañado en la palabra, toda palabra me circunda dando vueltas consecutivas que generan un vano vacío que a la vez es palabra; la cuál viste tu ausencia con vestidos de colores que habitaron en tus ojos. Y las palabras me acogen en el silencio que murió en la palabra que me cuestiona hoy en día. Esa palabra que me pregunta, a la que no sé responderle de vos. Porque yo soy la palabra.

La palabra es un insecto que se impacta contra el sueño irrealizado de permanecer inamovible, un insecto que se prende de tu ropa justo en el momento previo a que embarques esa góndola que te va a llevar lejos, a una lejanía que se hizo palabra, léxico. La palabra que ahora nos vomita, que nos llena y nos hace eludir al silencio, se ha hecho espacio, un espacio que está falto de vos, falto de esa palabra, pues la palabra eres vos.

Y el Lazo es palabra, es una conexión lógica que se estampilla contra el vidrio, con la brutalidad del "no hay vuelta atrás" de una palabra que no vuelve; es un sin retorno de la palabra. Ya nada queda suspendido, ya nada queda en punto suspensivos. La palabra quedó amputada en su caminar; más allá de una historia simbólica que deambula los miedos. Ahora que nosotros somos la palabra que muere, que sigue, que nos marca; somos palabra que se estanca, y que nunca más será lo que fue... una palabra.

martes, mayo 6

Desde algún lugar (desde donde quisiera verte)

En este lugar, me encuentro aferrado, dejando atrás o pateando esta vida adelante... Si preguntas cómo estoy, pues estoy acá, sin estar bien ni mal; estoy transitando este "aquí".

Y te veo desde acá; quizás es que en realidad no te veo y creo imaginar la magnitúd de tu presencia allá, en ese allá que es algún rincón del olvido. Desde este rincón que se congela, donde el silencio acalla, no quiero olvidarte... todavía.

Y lo benévolos vientos emiten en un grito ahogado tu nombre; en soledad los escucho y me susurran un verso dibujado de tu cintura, verso empapado de tu fulgor de aurora que me abraza cuando hace frío, tu fulgor que me regresa tu ausencia que se va un poco más allá.

No puedo encarar a la noche como solía hacerlo antes.
-Raúl no está solo-

jueves, mayo 1

Hipérbaton vacío

Se mecen en el olvido las hojas que se harán de errante vuelo mariposas - How I wish I could- pero no pude.

Creando está del fuego la marca un invisible silencio; fuego de hace días que mis manos quemó en errante vuelo - How I wish you could- pero no puedes

miércoles, abril 23

La Mujer que No Envejeció

Esa es la imagen que recordaré en la promesa de un amanecer que está lejos; cada silencio, cada palabra que se traduce en el complejo de ángulos insertos en la óptica de mi memoria. Esa es su imagen, ese es su latido que se extendió en la eternidad del tiempo, en ese mínimo instante en el que nos convertimos en uno... allá donde no existía más el tiempo.

Y el tiempo vendrá a agolparse en mi, me dibujará las líneas que se acostarán en mi rostro con el pasar de los días, y por consecuencia cesará el palpitar y ya no sentiré aquello que me arrebató abril en su otoñal mirada de cinco minutos -cuando la vida se hizo eterna en cinco minutos-. Así sin ningún reto, más memorias se irán formando, más memorias se concebirán en algún lugar del espacio donde no-se-qué, en algún resquicio escondido del lugar donde no estoy. Y algo no morirá, porque ella no envejeció; lo sabré cuando vea su rostro en mi lecho de muerte, ese rostro que no fue un futuro, su faz que será la misma lozanía que habré conocido toda la vida. La belleza que no se hizo una anciana hermosura en la promesa de un amor que renazca cada mañana. Aquella mujer que amo; aquella que no envejeció a mi lado.

martes, abril 15

Imagen del adios

El viento a kilómetros de distancia te lleva sola en la lejanía, te cierra los labios y te escucha cantar una canción que es un canto turbador y silencioso. Me ves desde tu escondite que ahora es el infinito, me haces las mismas señales que me hacían reir, y en tus ojos pueden verse ahora pequeños retazos del cielo donde te buscan las demás miradas -mas tú no estás ahí- Te esparces por los ramales de cada imagen que te mira desde dentro, que nos hace verte ahí, donde ya no estás.

Tu viento, en ternura, apagó la estela que nos circundaba hace tiempo atrás, estela que nos hacía visibles en las tardes de sábado en que tu sonrisa inolvidable se hacía cada vez más brillante; tu viento en soledad te susurra ahora mis palabras al oido, te dice que no te olvido, que no te pierdo. Y todo lo que puedo decir se pierde entre las hojas agonizantes de este abril otoñal desde donde te espero, donde espero que vuelvas a sonreir una vez más. Pero tú no vuelves.

En tu voz puedo presentir el silencio y la calma de tus labios encarnados; en tu visión puedo sentir y ver que no te veo, que veo el límite verdoso que te lleva lejos en la distacia, que te escapa como nosotros escapamos alguna vez; y se me escapa tu fugáz hálito que me mira desde el espejo, donde alguna vez soñe hallarte cuando mis imágenes se convertían en mis huesos; estos huesos que ahora desean seguirte en la estela que describe tu cintura, en la suavidad de tus manos que me acariciaban el rostro, o en el brillo marrón de tus ojos abiertos de par en par, tal como lo hacías antes de suspirar en el silencio acuoso de la frontera azulada.

La montaña se tiñe en cantares de oscuridad plateada, en caminos y atajos que desencadenan mi tristeza que es además la tristeza de las hojas, que te recuerdan caminando a mi lado tomando mi mano con tus dedos alargados; y la melancólica luz que ahora me ilumina no te iluminará más cuando estes caminando por la senda oscura a mi lado, buscando un lugar donde habitar, un lugar al cuál pertenecer, un lugar donde el frío se hace fuego que te espera en silenciosa paciencia.

-mi paciencia que te dice que te espero-

Vos eres la imagen del adiós, te pintas en cada arteria que palpita con fuerza en mi recuerdo abrumado; y desde el amanecer me hablas, diciendome que lo que quiera que signifique la constelación del cielo en tu nombre, significa tu presencia sempiterna en un retazo de mi alma; en un retazo donde crecen las flores de papel y las estrellas modulares. Sé mi propia despedida y yo seré la tuya cuando puedas hablarme en el silencio.

Eras, eres y serás... que estés bien donde quiera que estés; espérame al otro lado de la membrana.

lunes, abril 14

Saenz para una Despedida III (Ven)

Ven; yo vivo de tu dibujo
y de tu perfumada melodía,
soñé en la estrella a que con un canto se podría llegar
-te vi aparecer y no pude asirte, a turbadora distancia te llevaba el canto
y era mucha la lejanía y poco tu aliento para alcanzar un fulgor de mi corazón
-el que ahora estalla ahogado por alguna lluvia compasiva.


Ven, sin embargo; deja que mi mano imprima inolvidable fuerza a tu olvido,
acércate a mirar mi sombra en la pared, ven una vez; quiero cumplir mi desdeo de adiós

viernes, abril 11

Saenz para una despedida II (Como una luz)

Llegada la hora en que el astro se apague, quedarán mis ojos en los aires que contigo fulguraban.

Silenciosamente y como una luz

reposa mi camino

la transparencia del olvido.



Tu aliento me devuelve a la espera y a la tristeza de la tierra,

no te apartes del caer de la tarde

-no me dejes descubrir sino detrás de ti

lo que tengo todavía que morir.

miércoles, abril 9

Saenz para una despedida I (Eres Visible)

Permaneces todo el tiempo en el olor de las montañas

cuando el sol se retira,

y me parece escuchar tu respiración en la frescura de la sombra

como un adiós pensativo.




De tu partida, que es como una lumbre, se condolerán estas claras imágenes

por el viento de la tarde mecidas aquí y a lo lejos;

yo te acompaño con el rumor de las hojas, miro por tí las cosas que amabas

-el alba no borrará tu paso, eres visible

jueves, abril 3

Visión

En la mirada efímera que me circundaba
-me mirabas- y yo te miraba con curiosidad
En la oscuridad de una tarde que terminaba,
-como tu tarde y la mía- nos encontrabamos de nuevo
a solas-

Al lado del partir de aquellas imágenes rehechas
-sin mirarte te miraba- y me veías
increpabas mi mirada con tus ojos puros
y desde el silbido de la ciudad te escuchaba
mientras me veías en silencio

Y nada -esperando tu llegar imaginé tu imagen-
te vi caminando en la cercanía, en el mar de rostros.
Y viéndote llegar comencé a palpitar entero
-porque te ví mientras me veías-
y mientras no me veías te esperaba

lunes, marzo 24

Medusa

Esta noche la górgona se siente sola otra vez, las sierpes que nacen en su cabellera le muerden el rostro y su escamada piel no puede sentir nada; mantiene los ojos cerrados, ojalá y alguien se acercara a preguntarle el porqué de su soledad; más nadie se ha acercado a ella en siglos.

Acurrucada en el rincón más oscuro de la gruta que se forma en las rocas, mira como la luz de la luna recorre a medida que las horas van pasando, y ella, envuelta en fantasías llora lágrimas pétreas, lágrimas que le producen intenso dolor. A menudo odia sus petríficos ojos que hacen que cualquier mortal quede convertido en una escultura sin vida, odia su imagen envidia la hermosura sin embargo no hace más que lamentarse de su propia naturaleza.

Oye el tiempo correr como todos los días, como todos los meses, como todos los siglos que se ha rendido a su soledad, se dedica a ver a las estrellas cuando ya está aburrida de pensar y pensar, de masturbar su mente sin ninguna remuneración. Y se odia a mi misma, por ser el terrible mounstruo de leyendas. No tiene recuerdos más que gritos inconclusos, temores ajenos, ruidos de pasos que la atormentan, ella solo los llamaba, y se fueron convirtiendo en piedras a su paso, nadie ha escuchado su voz, y alguna vez quisiera que alguien la oyera hablar, balbucir su pesar, expresar su emoción.

Esa noche la górgona oyo nuevos pasos, más altivos, más suaves, y una leve sonrisa se dibujó en su rostro dragontino, corrió al encuentro de aquél que había venido en su búsqueda, el corazón le palpita, la inercia de su respiración agitada se hace más frecuente, y ve a lo lejos una silhueta, la silhueta invisible de aquél que había venido a liberarla.
-Perseo, sé que eres tú -dijo cerrando los ojos- Puedo sentir tu divino aroma, ¿eres alto y apuesto? ¿regordete? ¿Perseo eres tú que a venido a sacarme de mi tormento? Acaso vas a liberarme de mis pesos y penas, Perseo, adelante, tengo los ojos cerrados llévame contigo...

jueves, febrero 28

Galatea

Catorce preámbulos antecedieron al pálido escribir de Galatea, que, sin una pluma ni un lapiz, plasmaba su sangre en hojas de lino, dirimiendo sus venas para que el espeso líquido que de ellas manaba dibujara las letras una a una, haciendo de ese pedazo de tela inherte una mariposa que expelía luz por la boca... y Galatea se ponía la escafandra.

Cuando ella sabía que transgredía los cánones que debía llevar su soneto hecho viento, caminaba cerrando la herida, andaba y desandaba sus pasos; caminaba encerrada en su cuarto para no sentir en sus retinas un flujo de luz que pudiera dejarla ciega. Galatea reposa ahora, se mira a sí misma desde un agujero que ella misma hizo en la pared de ladrillo un día que no supo que hacer con su alma, se observa mientras duerme y sueña que es ella, que escribe y que sobradamente engulle su propio reflejo; cuando se ve a si misma cree morir de nuevo al amanecer. Galatea tiembla, su cuerpo apenas se mueve cuando sus pulmones se hinchan de dolor hecho oxígeno.
Un amanecer frío despertó entonces a Galatea que ya no se veía más a si misma sino en el espejo, sorbía con desgano el desabrido té del desayuno, se sentía quemada, se sentía inutil en medio de ese cuarto cerrado y deseaba con todas las fuerzas de su gastada alma poder salir de aquél cuarto del cual era prisionera; pero la luz la atemorizaba, sus retinas temblaban cuando algún rayo se colaba por los cartones que tapaban las ventanas, Galatea entonces suspiraba y recostada en su litera abría sus venas para poder escribir.

- "solías ser como mi gemela Galatea, solías estár conmigo en la alfombra de luz que circundaba tus cabellos, y si mal no recuerdo, acariciaba tu pelo con suavidad y ternura; ahora que ya no estás ni respiras, acaricio el polvo que se arrima en la cabecera de mi camastro... Sus dedos recorren mi cuello hasta mi pecho, Galatea, no sabes cuánto le temo".

Así, Galatea se vió de nuevo envuelta en un discurso en llamas, incorporándose, sintió de nuevo el mareo que la atrapaba cada vez que escribía demasiado; entonces cerró los ojos por un instante, por un efímero momento, para así, y de alguna forma, poder hacer desaparecer a los fantasmas que la acompañaban cada tarde; cuando volvío a abrirlos, vió su propia sangre chorreando por las paredes. Pero Galatea no está asustada.

Revisa una a una las palabras que ha escrito en busca de errores, las lee una por una; Galatea en lo más profundo de su inocente existencia primaria, sabe que no es más que un simple mito, se sabe todas las palabras de memoria, sabe muy bien que su realidad es tan solo una construcción ilusoria de palabras y discursos de los otros, de aquellos que la observan desde las rendijas de su habitación. Galatea devora la última bocanada de humo del cigarrillo que tiene entre los dedos, deja que lo demás se consuma en el cenicero que está atiborrado de colillas viejas y ceniza espesa hecha polvo; se pone la escafandra y echa a volar. Se siente débil, flotando entre las maderas de las paredes, a veces se golpea y las marcas le quedan firmadas en la piel; su piel, que desde hace un tiempo está invadida de sendos moretones de sus anteriores vuelos.

Cuando sus pies tocaron el suelo, el chirrido de las maderas desvencijadas del suelo la despertó, abrió los ojos, se sintió asfixiada, y supo, como siempre lo sabía, que era el momento de quitarse la escafandra antes de ahogarse con su propia libertad. Volvió a sentarse en la silla, abrió sus venas para volver a escribir esas historias; la tinta se compone en el lino a partir de su sangre; las palabras bailan y viven mientras Galatea muere al articular las frases.

Al día siguiente, Galatea resucitó al despertar, respiró profundo y poco después se levantó de su litera, le molestaba el aire viciado que gobernaba su habitación, le provocaba constantes cefaléas y arcadas; sin embargo, se negaba rotundamente a abrir las ventanas para no ver las luces de un amanecer nuevo. Hoy y por primera vez en su vida, ella escribe sobre sí misma, sus venas están casi vacías, se le han acabado las cajetillas de cigarrillos y cada vez es menor el ansia de escribir contra el deseo de ver algo más allá de lo que sus ojos le permiten; una lágrima rueda por su mejilla y corroe parte del texto plasmado en el último lino que le queda. Su mano se hace puño rápidamente y la presión hace que un estallido de sangre manche su piel desnuda, grita de rabia y frustración, vé cómo la salina lágrima que broto de su ojo derecho disuelve todo el lino donde vió escrita su propia historia, sus penas y sus tristezas, sus miedos. Galatea otra vez susurra suavemente su nombre, lo repite de vez en cuando, está encarnada, asustada y en posición fetal en una esquina de su cuarto, la esquina donde la luz de la vela jamás llegó; escucha cómo poco a poco el cebo del candil va estallando cuando la llama en el pabilo va agonizando; Galatea repite su nombre con más volumen.

Cuando la boca de Galatea hubo pronunciado la última sílaba de su nombre en un gran grito ahogado por la desesperación, escuchó como unos pasos se acercaban velozmente hacia su puerta, comenzó a temblar; cuando los pasos se detuvieron hubo un silencio incómodo en todo el ambiente y alguien rompió la puerta de un golpe. Galatea gimió con desesperación, se llevó las manos a los ojos y los cubrió con fuerza, a medida que sentía cómo la luz diáfana le iba quemando las retinas, el dolor le provocaba un temblor extraño en los globos oculares, lo último que vió es cómo un haz de luz la iba dejando sin vista. Le estallaron los ojos en un sonido voráz que devoró su corazón.

Galatea está ciega.

martes, febrero 19

Mensaje de una visión

Estabas perpendicular al horizonte desde tu posición clara, caminando con paso firme y seguro, sin sentir tanto la brisa del susurro que atravesaba a 45 grados entre la divergencia del tiempo y del espacio... tan clara como la voz que te llamaba "soy yo, he venido por tí... je t'aime... je t'aime". Pero no hacias caso, aún tenías los ojos cerrados y ese rostro dulce y tranquilo.

En el aire, un silencio electrico, tan azul como la noche, tan puro como tus dedos; en el aire, un silencio electrico te tocaba las pupilas, era el reflejo de tu expresión, tu silente deseo de permanecer inamovible en una pradera que no es alcanzada por los rayos del sol. Detrás de una fragil cristal construido por mis uñas y mis besos, estabas tú, rompiendo el silencio con un grito atronador, y mientras tanto la voz que te hablaba "ven conmigo mon chérie, vuela a mi lado, toma mi mano"...

a 45 grados en una divergencia espacio/tiempo, te vi llegando a mi vida... y mi voz te hablaba a medida que te acercabas... "je t'aime... gracias por llegar"

lunes, febrero 11

Iridiscencia

Aquella mañana decidí abrir mi pecho (rip it out) desgarrar la piel y que sangre un poco; aquella mañana no encontré más que escarabjaos retorciendose entre acabados estertores de mi respiración oblicua e innecesaria. Entre un tremendo ardor que me carcomía las uñas, sentí y oí mi propia voz ladrando, e indagué en mi vientre pensando cabizbajo... era el mismo dragón comiendose mis entrañas... y nada.

Aquella tarde esparcí mis ojos por las calles, los exprimí con fuerza para no encarar al espejo otra vez, miré con detenimiento mi imagen de resignación, continué caminando (jamás necesité la misericordia de nadie) y mis pasos eran seguidos por olas inexistentes... o sea nada.

Aquella noche aspiré el humo pesado, denso y magalomaniaco, corrí las cortinas una y otra vez, y no vi más que el solo reflejo de las estrellas en una noche nublada, nada, yo era un insecto buscando redención.

Aquella noche morí otra vez, y en una estela cansada olvidé mi alma, por las esquinas de mis ojos, confundida en la noche, vi una libélula que se creía polilla, taciturna y escondida (escurridiza) emulando sueños cons sus marrones y redondos ojos, disimulándose entre la polvorienta piel metálica de un universo cerrado... y escondida; me enamoré del opaco color de sus alas invisibles, porque estaba escondiendome yo también...

jueves, febrero 7

Here (there and everywhere)

Anoche tuve la epifánica presencia de tu voz aunque no hablaste -es lo que pasa cuando alguien añora con tanta fuerza volver a respirar- supongo que yo también te hablé en silencio mientras la lluvia caía sobre la ciudad... Por entonces tu voz y la mía se destacaron en presencia de los gritos inaudibles del radical sonoro que abrumaba mi alma -la cual tanto te extrañaba- depués todo es regocijo (ahora) ahora y de nuevo puedo decirte que te quiero... y repetirlo.

Otra vez (y ya van...) me quedo sin palabras que logren describir todo lo que pasas, aluviones de eventos que me aplastan contra la pared; ya sé que los sentimientos son efímeros, pasajeros, contraproducentes, fugaces, arteros, complicados, y hasta agonizantes formas de elevarnos en un abismo sublime... pero no me importa, qué más se puede decir entonces, si el mundo se acaba mañana sabremos que lo que sentimos fue eterno... o por lo menos hasta el final de nuestras vidas... y si no se nos viene niengún armaggedón ni mucho menos un cataclismo, sabremos que tenemos de nuevo la oportunidad de vernos a los ojos y hablar... o permanecer en silencio...

Qué se yo de lo demás... lo unico que sé es que te quiero... lo demás puede esperar.

viernes, febrero 1

de noche

Los tenues sonidos de la noche congracian cada una de la extrañas estelas de mi pensamiento que te dibujan casi tan bella como eres en realidad; si tan solo pudiera traspasar la burlesca ironía de la distancia que embeleza todo menos las estrellas, si tan solo pudiera darte mi mano justo ahora para hallar un segundo en medio de este mar de rostros... "si tan solo" es la mejor burla del verano.

y detrás de la barra de estrellas que olvidaron titilar esta noche, te escribo a manera de desahuciar el poco tiempo que falta para verte... mientras tanto te extraño... como todas esas tontas analogías que les gusta hacer a los ociosos... (te extraño como el mar a los vientos y esas estupideces...)

lunes, enero 28

_.-._

Hazme invisible a los ojos del silencio, revienta en cada instante las burbujas que se forman en los segundos que nos arrebata la distancia... y mientras tanto espérame un poco más...

por favor

miércoles, enero 23

Las cosas que puedes hacer mientras estalla una bomba atómica

Un momento después, el cielo se despidió de nuestros asuntos pendientes...

[Blindfolded]
El mundo flotaba sobre una especie de gel azulado, tenía un aroma peculiar, suave, adormecedor; atravesando aquellas paredes invisibles, el mundo caducó algún día y no nos dimos cuenta. Nos miraron las estrellas con sus rostros atónitos, nos llamaron con sus voves atronadoras, nos dijeron que veamos la tierra de nadie, pero estabamos ciegos.

[Revolutions]
Estabas enfermo, meditabundo en medio de este pequeño cuarto, las cuatro paredes se te cerraban [Pequeño hijo de asteroides semicirculares, ¿no ves que te he hablado desde que naciste?] Eras el último estertor de un mundo nuevo que había olvido ya el brillo de sus albores más risueños; te vieron las manos que te buscan con audacia, te vi morir, mientras agitabas tus manos

[Angelus]
En algún lugar existe un demonio que sabe mi nombre desde aquél día que tuve entre mis manos la clara idea de mirar al cielo y difuminar las matrices de cada una de las constelaciones. Jamás conoceré sus ojos, pero me mira en los cielos sin luna, en las noche oscuras, me observa desde el gentío, desde los árboles o entre las lozas de la calles; hay días en los que le temo, y hay días que desaparece.

[Easy]
Algunas veces, el frío roza mis cabellos, toma mi mano con sus manos frías y me ve directo a los ojos, escucho ahogar un grito y la niebal cubre el patio; imagino que estoy solo y camino de nuevo. Me rehuso a sangrar, la vida se rehusa a beber mi sangre, la muerte me torna en sustantivo y se confunde en mis versos, escapa con el humo de los cigarrillos... se trafunde en mi garganta.

[Tocata y Fuga]
Algunas veces habitaste entre mis letras, y puedo confesar con vanidad de que a veces escribes en mi nombre, que usas mis palabras y dibujas mis letras, que te fumas mis consonantes y me llenas la boca de humo. de noche me asfixias y resucito al día siguiente. habitas en mi espejo, palpitas conmigo...

miércoles, enero 16

Volver a casa

Camino por esas delgadas y atiborradas calles, llenas de gente y ruido, la misma gente y el mismo ruido; todo, todo aburrido, dando un paso tras otro como muerto vivo, como difunto sin resucitar. Camino sin caminar, ando sin avanzar esperando que pase el tiempo que no pasa... todo para volver a casa.

Hace frío, llueven piedras, globos y música cromática de viento y percuciones. Sigue siendo igual a cómo cuando me alejé de allí, y hasta ahora no exraño nada, veo las calles que solía recorrer, las puertas en las que me solía sentar, los lugares donde aprendí a respirar, y no veo nada más que estío, y siento el mismo hastío, han sido pocos días pero ya quiero escapar del mundo que va cerrando las paredes a mi alrededor... es que ese lugar no es mi casa.

Y me elevo en esos gritos otra vez, eludiendo borrachos y altisonantes bandas de música folclórica, repudiando la obra maestra del patrimonio oral e intangible de la humanidad, desesando que este acrnaval acabe ya, que ya no sigan vilipendiando cultura y confundiendola con cualquier pretexto para perder la cabeza, no quiero volver, me quedo acá donde me siento en mi hogar, donde respiro el aire que amo respirar, donde mis venas sienten cada palpitar, donde no importa el tiempo ni el espacio, me quedo en un lugar en el que nací a la vida, al dolor, a la alegría y al mundo real. Me quedo a su lado....

miércoles, enero 2

Sentí las doce campanadas en mi pecho y también el reloj fundiendose en el epicentro mismo del tiempo que se seca; sentí de una manera extraña la brillante llegada del verano que arremetía contra esa escala en Do mayor. Un narrador omnisciente observaba el laberinto de la alborada, donde su voz se estremecía sin temor ni calma; antes de naufragar, la vi tan lejos.

Sentí su caminar retumbando en las baldosas, un sábado de tinta corta; sentí las canciones que bordeaban las briznas de la noche sacrificada, aquellas que bailaban circundando sus pasos entre meoldías inconclusas, entre armonías frescas; sentí el sentir del que no siente, como el humo que mareaba mi visión. La intacta asunción de la risa bnurda de todas las cosas que quise y nunca tuve; sin duda, creí adivinar su voz tan distantemente cercana. Y cedí... a decir verdad, me dejé llevar.

Creí verla caminar sobre la alfombra con sus pies desnudos que tocan el infinito cuando llegó el silencio para trastocar la noche, así se transformó su aparición en realidad. Creí verla sonreir, y su rostro que estabilizaba las partes disecadas de mi espíritu se hacían pequeñas estelas de metal; creí verla caer, saltar desde la buhardilla hacia un abismo que le hablaba a mi sentir; sentí su mano en mi espalda, sabía que era de carne y hueso.

Sentí el aflojarse de los tiros de este chaleco de fuerza, escuché mis venas rotas bajo la presión sistólica del mundo común ahogado en estertores; y detrás de esos sueños azules, donde se esconden los colores de la realidad, sentí su respiración al borde de mi boca.

lunes, diciembre 31

fuckin' new year

La forma más bella de morir es respirando, con el corazón cansado de latir, la forma más bella de morir es intentando y sin rendirse en absoluto.

Es el último día de este año, no tengo ganas de hacer esos clichés de ir recordando las buenas y las malas de estos pasados 364 días, las briznas de este cigarro van cayendo por el piso de mi habitación y solo mis pulmones llevan la cuenta de cuántos puchos me he fumado -en el tercero ya mi cabeza dejó de contar- Creo que ha sido como todos, un año espectacular.

No tengo intenciones de desearos felicidades, a vosotros que me leen ahora, les deseo alegrías y tristezas, puteadas, borracheras y crudas, días malos y días maravillosos, resignación y lucha, depresión y manía, tangos y danzones, les deseo que este año que viene vivan... y no solo existan.

Ojalá que el 2008 se acabe el mundo, y si no se acaba, pues velas y buen viento, rock'n Roll para todos, a seguir siendo los mismos, a cambiar se ha dicho, hagamos de nuestras vidas lo que queremos, hagamos realidad nuestros deseos y démosle un portazo en la jeta al destino. y por si no les gusta respirar, pregunten si venden pastillas para no soñar...

Un abrazo a todos ustedes y un brindis con champangne!

miércoles, diciembre 26

Pronto

El día que calle el viento en las calles del estío, entre vanas promesas que se funden en el tiempo, voy a partir sin rumbo fijo, sin nada que me detenga, sin el después del después que no exista más. Tendré entre mis manos una mente envejecida, una ilusión desvencijada y el ánimo incendiario.

El día que deje de pintar tu nombre entre el asfalto y el polvo, el día que nazca solo y muera lleno de cosas sin sentido, pintaré tu rostro entre mis venas, en los antebrazos sangrantes; pintaré tu estela, me haré carne cruda al anochecer, desapareceré para sofocarme con el aire, para ahogarme con la insatisfacción de morir solo. Cuando no haya nadie detrás tuyo para rescatarte cuando caigas -te sigo hasta los lugares donde no haya luz- entonces no volveremos a ver al mundo a los ojos.

En las viejas ruedas que la gente lleva entre las ojeras del día anterior -la gente solo es gente- puedo ver, y hasta oir, los gritos y movimientos de cada gota del rocío matutino, cada gota congelada y hecha escarcha, y entre la escarcha y la neblina del amanecer, creo verte, y te saludo a lo lejos, te miro a los ojos y confío en tu respiración -no desapareces- te quedas estática en el horizonte, y te veo venir sin andar.

De aquellos momentos cuando el sol brillaba sin luz ya no quedan más que recuerdos y uno que otro resquemor en la piel, las tristezas borradas; bajo el halo de luz ya no existen ni la pena ni el olvido, solo vos y yo... del otro lado del mundo solo oscuridad, del otro lado del mundo nuestras voces apagadas.

Cierra y late en nuestro nombre, en medio de este sueño que nos separa, sueño hecho distancia, sueño hecho lapso y compás inconcebido. Diana, tu corazón late en mí, solo oye el compas y el ritmo de espera. y esa voz que dice "pronto, pronto"

domingo, diciembre 23

Wish You Were Here

Después, desesperadamente, pensaba en volver a caminar un poco, en visitar todos esos lugares que olvidé visitar... Caminar de aquí allá, como cuando aun mis zapatos estaban pegados a este lugar que ya no es más mi hogar, más ahora, estoy lejos de vos. Y me quedo viendo el techo como infatuado con alguna especie de imagen dibujada por donde se escurre la pequeña lámpara que me ilumina... escucho cada canción y se me hace dificil pensar... Ok, temo aceptar que no tengo nada mejor que hacer que mirar el techo y esperar a que salga el sol.

Y me veo aquí esperando al amanecer para salir a caminar, despejar la mente, esperar y esperar, con paciencia y determinación, aprendiendo a tocar la guitarra, componiendo una que otra canción... intentando que no salgan tan cursis como las anteriores.

Estoy un poco perdido; sí, lo sé, estoy un poco despistado, casi como siempre, estoy y no estoy a la vez... y estoy un poco asustado también...

Somos dos almas perdidas nadando en una pecera, hallando los mismos miedos viejos... Wish you were here.

viernes, diciembre 21

While I Remember You

Estaba mirando por la ventana mientras viajaba. A medida de que le paisaje alteño se iba haciendo más y más desierto, el frío comenzó a trepar por el vidrio... y pienso que estoy extrañandoté desde ya. Pero vale la pena el tiempo, porque aun me queda la nostalgia de tu piel aterciopelada, de tu sonrisa y tus ojos tristones... No sé que tanto valga la pena, pero de todas formas te veo mañana, aunque esta noche dure 2 meses...

Desarma y sangre... ultimamente estoy con muchas canciones en mi cabeza...

viernes, diciembre 14

Silly Love Songs


Porte/ Sesión 1: Acelerando mis latidos 18/12/87

Y sé que soy un fantasma, y tengo entre mis manos tus calles y avenidas, el humo de tus ojos, la lozanía de tus labios. Sé que soy un fantasma, y que me tienes atrapado entre un montón de cruces y entrevistas postergadas, sé que me aprisionaste entre mis libertades y entre mis elecciones... a veces, soy tu fantasma favorito.

Sería hace un mes, tal vez, o quizás más, que en el silencio se hicieron claras ambas voces, sería hace más de miles de años en que dejamos de contar el tiempo, y tal vez, fue ayer. Al lado de las lámparas incandescentes te acostaste por un momento apoyaste tu cabeza en mi hombro, me miraste y cerraste los ojos por un instante; cuando el mundo está al borde del colapso, solo faltas tú para elevar la frecuencia de mis latidos... y el mundo se desencadena.

A veces las personas necesitan llenar el mundo con tontas canciones de amor

domingo, diciembre 9

Lennon

Fuera del mundo real, te pedía que te imaginases un mundo diferente; guitarra en mano, al lado de un piano, solo te pedía que te imaginaras a toda la gente.

Fuera del mundo real, te hablaba en palabras que nadie habría conocido de no ser por el amor, esculpía las imágenes de sueños que se emancipaban en tus oídos.

Fuera del mundo real, imagina que eres tan solo un ser humano, no existe la política ni las guerras ni los ideales, solo el ansia de ser felices
"La vida es eso que te pasa mientras estás ocupado
haciendo otros planes"

domingo, diciembre 2

El rock'n Roll de los suicidas

landscape 1: La espina en el ojo
Él la miraba con cara de que no creía lo que sus ojos captaban, él la miraba y escondía en su rostro aquella sonrisa que emancipaba sus latidos, en lo más profundo de su ser él la miraba... y ella existía a pesar de toda la luz que inundaba el mundo. A cambio de nada sonreían mutuamente.
-got something in my eye-

landscape 2: despertar para siempre
Él la miraba con cara de que cada segundo que pasaba socarraba la superficie de sus pupilas, él la miraba y lanzaba un señuelo que contenía una contraseña llena de motivos extraños; las palabras y viejas y desempolvadas se cultivaban en sus manos... y ella existía no obstante la mente clara intentaba extinguir los recuerdos bellos de aquellos días.
-need a place to rest-

landscape 3: giros en tu alma
Él la miraba con cara de que necesitaba una que otra palabra de las que salían de sus labios, él la miraba y rebuscaba algo en sus ojos, tal vez una crónica que girara en sus pupilas, e´l parecía estar buscando la locura y la compatibilidad de aquello que fuera completamente diferente y ajeno al mundo real. Los demás soñaban a soñar, los demás imaginaban iluminar sus historias, los demás delataban sus deseos de ser. A lo mejor resultaba no ser nada... y ella existía, sin importar la sequía de sus ojos, existía en un zumbido
-I'm the dust in your shoes-

landscape 4: latidos en el escenario
Él la miraba con cara de que anhelaba un dibujo en las nubes, él la miraba y mientras tanto cicatrizaban sus heridas, mientras tanto entre los musgos, crecía algo de lluvia, algo se mojaba en aquél pequeño lugar del alba; él la miaraba y creía sangrar... Ella existía de todas formas, aunque todo se había hecho polvo y su corazón escapara de la escena, aunque todas las mañanas el mundo temblara al despertar.
-I know your face behind the paper-

landscape 5: casi como un sueño
Él la miraba con cara de que soñaba que el juego que los hacía felices no acabara, él la miraba y sonreía con pesar, pues el sueño había acabado. Todo parecía menos brillante ahora, todo parecía normal. Las rodillas le temblaban -qué emoción habría de amparar su pecho- por los huesos ascendía una electricidad estática que le palpitaba en las venas... Ella existía, porque cada segundo se convencían de que algo los llamaba por sus nombres en medio de la atmósfera. Sin saberlo bien, caminaron en el profundo abismo, al filo del silncio, y s sentaron uno al lado del otro, sin mirarse abrieron sus bocas
-when worlds collide-

landscape 6: todo vuelve a renacer
Él la miraba con cara de que el último suspiro de su pecho se había fundido en el infinito, él la miraba y esperaba poder mirarla un poco más -solo 5 minutos- y después de cada beso, una mano extraña escribía extrañas palabras en sus labios, sellandolos así para que la esperanza no escape del último refugio al que entregaron sus ojos, sus oídos y sus manos. Y en cada argumento, un crepusculo bañaba sus rostros, y volumen sobre volumen, en medio de aquel silencio austero, se veían partir cada cual por su lado... cuando se hacen los meses más felices de sus vidas
-and if the sun refuse to shine...-