martes, junio 26

Norte

Cuando caí en lo profundo de tu cristal y llamaste a tus canciones por mi nombre, sentí ese pequeño salto dentro de mi pecho (ese estallido que se asemeja a una erupción del Vesubio) y aqui estaba de nuevo hundiendome en la fé ciega de continuar. Después continúo aqui.

Me llamaste en medio de la noche, intuías que correría a casa, que abandonaría este lugar; y dirigiste tu dulce mirada contra todos mis fantasmas. Te dijeron que no vuelvo más. Ahora estalla un recuerdo cerca a tu espacio... ahora no.

Y se nubla otra vez la ciudad, las nubes amenazan de nuevo, entonces camino con dirección norte, hacia lugares que no conozco, hacia lugares que no tengan tu nombre, ni tu aroma, ni tus brillos prestados. Ahora no estoy, dicen que salí.

3 comentarios:

Azael dijo...

increiblemente necesario decir esas palabras ala hora presisa. me gustó mucho

Azul... dijo...

Escapar... no me dió resultado, sabes? al menos a mi no... el día que me di la vuelta y le planté cara a los fantasmas, ese día, les abrí la puerta y le dejé salir, ese día... ese día escapé de verdad...

Raúl dijo...

A mi tampoco me da resultado el escapar... será que hace falta práctica o realtmente no es la alternativa correcta... lo que sí, alguna vez es necesario decir.. "detente, hasta aqui llegaste, y no avanzarás más"...
Un Saludo Azael, un Saludo, Azul!
(cachas que un beso azul.. suena a triste..??)